Sugerencias para el control del nerviosismo
 
  • Adopte la postura que le haga sentir cómodo, ya sea sentado(a) o de pie. Si está de pie, procure tener una pierna más avanzada (adelante) que la otra, ello favorece la emisión de la voz.

  • Mire al público cara a cara. El error más frecuente es mantener la vista en el suelo, en el techo o en las hojas que uno esté leyendo.
    Por tanto, hay que mirar a la gente cara a cara. Si usted fija sus ojos en los de las personas que le escuchan, éstas se concentrarán en sus palabras y dejarán de prestar atención a los posibles errores que usted cometa.

  • Una vez que haya empezado a hablar, el nerviosismo desaparecerá por sí mismo. La persona que se dirige a un público puede temblar antes de empezar a hablar pero en cuanto dice sus primeras palabras y comienza a oír su propia voz, poco a poco su inquietud desaparece.

  • Si conoce bien el tema sobre el que hablará, o al menos lo suficiente, entonces todo irá bien. No se deje vencer por el pánico.